Busca reflexionar sobre la falta de belleza en la cotidianidad de hoy, tan alejada a la creación, a la dedicación, a la identidad y al juego.
La pregunta es ¿Qué lugar ofrece el mundo actual para la belleza?

Nace a partir de la importancia cotidiana que le dedico a pensar de dónde salen las cosas, quien las piensa? Que hace que algo tenga identidad? y el vacío que me produce que algo no la tenga, quizás que su existencia sea producto de las leyes de la rentabilidad y nada más.
Busca poner en evidencia toda la riqueza que se pierde alrededor de la perdida de los oficios, aquellos que reflejan un modo de vida, en contraposición de la estandarización y homogeneización de todo aquello con lo que compartimos la vida.
Los saberes ancestrales truncos, rotos, enterrados junto a las ultimas manos que construyeron y amasaron aquel ultimo eslabón.




Una serie de fotografiás/ dibujos



".. Era un ogro convertido en proletario metalúrgico del mismo modo que, andando el tiempo, la selva se había transformado en urbe sin que ni el uno ni la otra hubiesen perdido del todo su ancestral naturaleza.
Bigornia era obrero mecánico. Herrero, hijo de herrero, nieto de herrero, había conocido en su infancia una fragua que no difería gran cosa de la de Vulcano, y, aunque el raudo progreso mecánico del siglo hubiera sometido su instinto y su fuerza natural a la deformación y al aguzamiento de la técnica, conservaba un fondo selvático de forjador primitivo, de hombre de bosque, fuerte y de gran resuello, que por primera vez junta el hierro, el fuego y el agua, sopla, golpea, templa e inventa el acero...Pertenecía a esa ultima generación de obreros mecánicos que tienen todavía un cierto sentido humanístico del vivir y el trabajar.
Los mas jóvenes que el, lo que han empezado el oficio cuando ya las maquinas tienen rodamientos a bolas, no saben nada, ni conservan ese instinto primitivo, ese buen sentido de hombre en estado de naturaleza que a Bigornia le permitía a veces alumbrar con sus luces naturales la confusión de los ingenieros.."

Manuel Chaves Nogales
A sangre y fuego
Un creador compensa sus dificultades económicas con otro tipo de satisfacciones.
Suele ser así. Y la contrapartida es que el ambicioso de bienes y dinero esta impedido de llegar al menor descubrimiento, a ninguna legítima creación. Y, por supuesto, al placer que se logra a través de ella.
Se rechazan total, mutuamente, la ambición por el dinero y la tarea creativa. Y esto se da no sólo en relación con el psicoanálisis, por supuesto. O alguien por dar ejemplos, puede imaginar que Artaud o Roberto Arlt escribiendo por la ambición de hacerse ricos?

Pichon Riviere.
“Uno no gana porque vale, sino que vale porque gana”, habia comprobado, hace ya algunos años. Él no se refería al futbol, pero era como si. Prohibido perder tiempo, prohibido perder: convertido en trabajo, sometido a las leyes de la rentabilidad, el juego deja de jugar. Cada vez mas, como todos lo demás, el futbol profesional parece regido por la UENBE ( Union de Enemigos de la Belleza), poderosa organización que no existe pero manda.

Eduardo Galeano
OFRECER
ENTREGA
OBSERVACION
MIRADA EN EL DETALLE.
Eso que pasa cuando alguien hace algo. Se fija en el detalle.
IDENTIDAD
OFICIO
BELLEZA
PLACER
VALOR -
SOLEDAD
DESCUBRIR
SONIDO - cada lugar, cada acción tiene su sonido
























que importante que algo no sea pretensioso
pensar en la trascendencia de las cosas. Lo que se aprende, lo que se transmite.

FALTA DE IDENTIDAD
COMO SE CONSTRUYE la misma?
CAPACIDAD DE SORPRESA
FORMAS
Transmitir :

3. tr. Hacer llegar a alguien mensajes o noticias.

Sin.:
comunicar, informar, difundir, divulgar.


OFICIO
Del latín officium, antes *opifakio, antiguo derivado de ops, opis ("poder", "capacidad", "recursos").